Tengo la tele puesta, varios toreros hablan de la reciente muerte
de uno de sus compañeros de “oficio”. Cambio de canal y al rato en un programa
de otra cadena entrevistan a un torero retirado de los ruedos hace años. No
tengo ni idea de que va la cosa, hasta que en un momento de la conversación le
hacen la controvertida pregunta sobre si el toro de lidia sufre o no sufre. El
torero responde de manera habitual, es decir, que el toro no sufre, que esa
raza de animal estaría extinguida si no sería gracias a los ruedos y las
ganaderías, y que en definitiva, el animal disfruta en la sangrienta contienda
etc. Este hombre, como otros muchos colegas de profesión tiene un marcado
carácter religioso, así que yo me hago la siguiente reflexión.
Supongamos que Dios creó el Universo en 7 días, parece
ser que después de semejante ajetreo y estrés ,en algún momento y una vez terminada
la mudanza le dio por concentrarse en la
futura “diversión “ y jolgorio del pueblo español, y en vez de pensar en
carreras de saltamontes o en políticos honestos,
fieles, serviciales como los animales ,o
en algo un poco mas inofensivo y dañino al ojo humano, creo el toro de lidia,
un animal (parece ser) exento de sufrimiento y que está aquí para lo que
está ,para sufrir un calvario que al
final lo lleva a la muerte con agonía
incluida y retransmitida por TV…pero lo lleva implícito en la sangre (según
cuentan los entendidos en el tema) los folklórico-tauromáquicos y tele 5.Pero ya puestos a tirar del sarcasmo y la socarronería televisiva o “informativa “podíamos pensar (por ejemplo) que si a un militar con tradición castrense le vuelan los huevos en cualquier batalla o conflicto, o le dejan en silla de ruedas o de aquella manera, tampoco le debería resultar ofensivo ni dañino, ni debería tener sufrimiento alguno, se supone que le pasará como al toro, lo llevan en los genes, han nacido para eso. Y si nos quitásemos del medio a todos los parásitos que no sirven para nada en este país (incluido yo) esto sería el paraíso. Incluso llevándolo al terreno religioso(al que hace honor el entrevistado) es de suponer que lo de Jesucristo en la cruz fue un guateque, ya sabía a lo que venía, además el evangelio según el tío Lucas HOOL!dice que en la famosa Sabana Santa se encontraron restos de farlopa ,y que los que estaban a su lado en la cruz eran dos traficantes de droga colombianos que vivían en Jerusalén y se encargaron de suministrarle las sustancias y “chucherías” suficientes para que no se enteraría de nada y de paso pegarse un subidón de aquí te espero a los cielos ,así que no se para que tanta película ,tanta Semana Santa y tanta ostia sobre la pasión de este hombre, que encima después del fiestón a los tres días se le vio en un tugurio de carretera tomando coca colas con paracetamol para la resaca ,y no contento sigue dando por culo con todos los gastos pagados. Porque este de carpintería nada de nada (salvo un juego de esos infantiles que le regalaron los reyes y algún tutorial de You Tube ) .Además, puestos a rizar el rizo de la ironía, todos nacemos para morir, no solo el toro, así que por esa regla de tres la revuelta está servida.
Pero volvamos a la realidad, esto no es solo cuestión de
toreros y aspirantes a señoritos con folkloricas, aquí cada cual justifica su
sangría en base a sus intereses, y así tenemos al mundo toreando y esquivando
psicópatas como puede cada dos por tres. En mi opinión, con respecto al mundo
taurino, que nadie me intente vender que a un toro se le puede descuartizar
como si de una radio se tratara, me
basta con mi convencimiento ,no me hace falta que nadie me intente
disuadir con dudosos argumentos que
atienden mas a intereses que a sentimientos, pero es mi humilde opinión . La
información está al alcance de cualquiera y que cada uno saque sus propias conclusiones.
En lo que a mí respecta, no es un espectáculo de mi agrado, como tampoco lo es
ver un balcón lleno de jaulas con pájaros y otras actitudes de algunos que se
denominan amantes de los animales. No me produce alegría ni tristeza lo que le
pase a un torero en el ruedo, me resulta indiferente. Así que hoy me comeré un
bocadillo de ibuprofeno con ancas de langostino y mermelada de lorazepam. Patxi
Sagarna
